En esta entrada os contaré mi rutina facial nocturna. Aunque haya descrito esta rutina como nocturna, intento hacerla en cuanto llego a casa por la tarde porque antes de dormir me da muchíiiiiiiiiiisima pereza hacer todos los pasos que os voy a contar, pero que son absolutamente necesarios si queremos mantener un rostro limpio (al menos para mí :)).
El primer paso, si me he maquillado, es pasarme una toallita desmaquillante por la cara y el cuello. Procuro que sean toallitas para desmaquillar también los ojos, con lo cual no tengo que andar con dos productos diferentes. Ahora mismo estoy utilizando unas de Nivea para pieles mixtas y normales aptas para maquillaje waterproof, así que me quito hasta la máscara de pestañas.
Antes de estas toallitas he utilizado de otras marcas como Deliplus para piel sensible que van muy bien.
Cuando se me termine este paquete de toallitas, probaré a utilizar el desmaquillante en aceite de MAC porque he leído maravillas de él; a pesar de ser un aceite, no aporta grasa a la piel.
El siguiente paso después de desmaquillarme, es aclararme con agua fría y limpiarme la cara con la crema limpiadora-exfoliante «Piel de Ángel» de Lush.
No sé si crema es la mejor palabra para describir este producto; es una especie de pasta, que al contacto con el agua, como los exfoliantes, se deshace y produce un efecto de limpieza profunda.
Como la mayoría de los productos de Lush, está compuesto exclusivamente de componentes naturales. Estos son: almendras en polvo, glicerina, kaolin, agua, aceite de lavanda, absoluto de rosa y flores de lavanda.
Después de dar un masaje con la crema por todo el rostro, me aclaro y me queda la piel muy limpia y suave.
Para eliminar los restos de «Piel de Ángel» que no haya eliminado con el agua y para calmar la piel tras la limpieza, me pulverizo la cara con el tónico «Tea Tree«, también de Lush, y retiro el producto con un algodoncito. Describen este producto cómo tónico y desintoxicante de la piel grasa. Está compuesto de té, pomelo y enebro.
He de decir que no me acabo de acostumbrar a esté tónico tan «natural», porque hasta ahora siempre había utilizado el de Clinique del sistema de tres pasos. El tónico de Clinique es bastante fuerte comparado con este de Lush que es casi como agua.
Por último, me aplico una crema hidratante y un contorno de ojos (tampoco me acostumbro a usar contorno). Ambos de La Roche-Posay.
La crema hidratante es la Effaclar Hidratante Matificante Sebo-Reguladora. Es una crema ideal para piel mixtas y pieles grasas ya que ayuda a controlar el exceso de grasa del rostro. La he estado utilizando durante poco más de un mes y me esperaba un poquito más, no me acaba de matificar la piel y al cabo de unas horas de habérmela aplicado, me aparecen brillos y al final del día continúo notándome la piel grasa. En cuanto se termine el frasco, empezaré con una hidratante también especial para pieles grasas de Shiseido.
El contorno es el Substiane. Es un tratamiento reestructurante antiedad que da un efecto alisado y descongestionante al aplicarlo. De momento es el único contorno que he utilizado, con lo cual no puedo compararlo con ningún otro.
En el próximo post sobre la rutina facial, os hablaré de mi rutina facial matinal 🙂
Y vosotras, ¿os vais a dormir con la cara bien lavadita?
Mua!
@beautyHolic 